El crossfit es un entrenamiento de alta intensidad que se ha vuelto muy popular en los últimos años con muchos gimnasios ofreciéndolo entre sus programas de ejercicios. Es un método que ayuda a disminuir grasas, ganar masa muscular y quemar importantes cantidades de calorías.
Por el tipo de movimientos y rutinas que se realizan es importante contar con la guía de un profesional, de manera que el ritmo se adapte adecuadamente a la edad o condiciones físicas, así como a los objetivos que se quieran lograr.
Como se trata de una actividad de alta intensidad las lesiones son un riesgo latente, de hecho se estima un índice de lesiones de distinta gravedad de 3,1 por cada 1.000 horas de entrenamiento de crossfit.
Para tener una idea de estos incidentes, se puede decir que suelen ser similares a los que ocurren en deportes como el levantamiento de pesas, pero mucho menores que en deportes de contacto como el rugby o el fútbol americano.
El crossfit fue creado en 1974 por Greg Glassman, un estudiante universitario que trabajaba con atletas en varios gimnasios de California. Llevó su técnica al entrenamiento de policías y bomberos y de allí se empezó a extender a los gimnasios del mundo.
Cerca de 600.000 personas practican crossfit en Argentina e incluso el país ha participado en el mundial de la disciplina. El lugar donde se practica recibe el nombre de box y cada clase dura de 45 a 50 minutos. El periodo de recuperación es de 48 a 72 horas.
Los principales ejercicios que se realizan son sentadillas, peso muerto, empuje de hombros, flexiones y remo. Algunos gimnasios los combinan con carreras breves y bicicleta estática. Al ser rutinas de intensidad, el cuerpo se va adaptando a medida que avanzas. Los primeros progresos se van viendo unas cuatro semanas después de iniciar.
Requiere de una indumentaria más o menos específica para entrenar. Por ejemplo, se suele recomendar que la ropa no sea completamente holgada y zapatillas de entrenamiento y no de aquellas para correr o cualquier tipo de deportivas. Es importante enfocarse en las más cómodas para las sentadillas, levantamientos, saltos, etc.
Aunque el crossfit tiene entre sus beneficios que ayuda a bajar de peso, si lo practicas con ese objetivo es clave que también mantengas un régimen alimenticio que te acompañe. Por eso, la consulta con expertos en nutrición será lo más útil.
Los especialistas recomiendan que antes de empezar a ejercitar hay que consumir proteína e hidratos de carbono de digestión rápida, como banana, pan integral, tortitas de arroz y huevos, batido de frutas o yogur.